Nuestra aventura por el valle de Katmandu, dentro del viaje al Nepal en 2007, nos lleva a la tercera ciudad de los antiguos reinos dominantes del valle, Bhaktapur, también llamada Khwopa, por los Newars que aun son mayoría. Fue capital del Nepal durante la primera mitad de la dinastía Malla hasta el siglo XV. Se sitúa a unos 13 km al este de Katmandu y es la más pequeñas de las tres ciudades estado medievales del valle, aunque nos pareció la mejor conservada. Paseando por sus estrechos callejones pudimos ver a los artesanos tejiendo telas, cincelando la madera o como secaban sus cerámicas al sol. Su centro histórico destaca por su arte y arquitectura tradicional.

Bhaktapur tiene tres plazas principales, la plaza Durbar, la Taumadhi y la Dattatreya. Cada una de ellas con una serie de características propias y monumentos emblemáticos, llenas de imponentes templos que comprenden algunas de las mejores arquitecturas religiosas del país. Comenzaremos por la Plaza Durbar que se extiende por una superficie de 11 km2, aproximadamente. Se cree que fue el rey Yakshya Malla quien mandó a construir esta plaza, en 1427.

En nuestro caso accedimos por la antigua puerta del Oeste. Ante nuestros ojos se abre un amplio espacio con el palacio real a la izquierda y varios templos a la derecha. El primero que vemos es el Basantapur Chowk, del que solo quedan los dos leones que lo protegían y las esculturas de las diosas Bhagwati Ugrachandi y Ugra Bhairav, después del terremoto de 1934.

En el lado opuesto encontramos los templos de Char Dham, un conjunto de cuatro templos que se consideran un lugar que ayuda a alcanzar el moksha o salvación para el hinduismo. El templo de Kedarnath es de estilo shikhara y está dedicado a Shiva, el templo Radhakrishna de dos techos presenta diferentes encarnaciones de Vishnu en los puntales del techo y una estatua de Garuda en el pilar de la entrada, el templo de Rameshwar, está coronado por una cúpula ornamentada, y por último el templo de Badrinath, también en estilo shikhara es sagrado para Vishnu en su encarnación como Narayan.

Adentrándonos en la plaza, a mano izquierda vemos el edificio que alberga el Museo Nacional de Arte, donde se encuentran las colecciones de manuscritos y pinturas de la época del gobierno de Malla. Junto a los leones de la entrada, hay dos imágenes en piedra, son las imágenes de Hanumanta Bhairav (izquierda) y Narasimha (derecha).

Ahora llegamos a la Puerta Dorada, Golden Gate, finalizada por el último rey Malla, Jaya Ranjit Malla, en 1754, es una verdadera obra de arte. La parte superior de la puerta está adornada por una figura de la poderosa diosa hindú Kali junto con la imagen de Garuda (un pájaro mítico) asistida por dos ninfas celestiales. En el centro de la torana hay una figura de la diosa de diez brazos Taleju a la que asisten Shri y Laxmi sentada sobre un cocodrilo y una tortuga.

La puerta proporciona acceso a los patios interiores del Palacio Real, al Kumari Chowk, Taleju Mandir y Naga Pokhari o Sundhara. Solo se puede visitar el estanque real donde se realizaban los rituales a la diosa Taleju. El estanque está rodeado por una serpiente de piedra, Naga que se retuerce antes de levantarse en el centro. El agua brota de un magnífico dhara (chorro) en forma de una cabra que es devorada por un makara.

Foto de wikipedia

A la derecha de la Golden Gate encontramos el Palacio Real también conocido como el Palacio de la 55 ventanas, por las 55 intrincadas ventanas de madera que se extienden a lo largo de su nivel superior. Mandado a construido por el rey Bhupatindra Malla sufrió muchos daños durante el terremoto de 1934 y permanecía cerrado. Además cuando lo visitamos estaba tapado por andamios.

En frente del palacio se erige sobre un pedestal la estatua del rey Bhupatindra Malla y al lado, la campana de Taleju, que se utilizaba para anunciar las oraciones matutinas y vespertinas. Detrás de éstos se levanta sobre una base de tres etapas el Templo Vatsala Devi, en estilo Shikhara, construido en piedra arenisca. Está dedicado a la manifestación Vatsala de la deidad femenina Durga. Una pequeña escalera protegida por animales sagrados da acceso al santuario y al deambulatorio.

Mirando de frente al templo Vatsala vemos a la izquierda el templo Pashupatinath o Yakshyeshwor que data del siglo XV. Construido en dos pisos de madera en forma de pagoda nepalí, destacan los 24 puntales del techo del templo que presentan diferentes imágenes de shiva, shakti, y también figuras eróticas. Si ahora miramos a la derecha estaremos contemplando el Chyasalin Mandap, un pequeño pabellón octogonal de madera de dos pisos que se usaba como lugar de recepciones reales, espectáculos de música o poesía.

Estamos llegando al final de la plaza, dejando atrás la esquina del Palacio Real encontramos el Templo Siddhi Lakshmi, a mano izquierda. Una impresionante escalera central de piedra custodiada por guardianes en las plataformas circundantes que conducen al pequeño templo de estilo shikhara en la parte superior. A modo de curiosidad, el primer par de guardianes son humanos, masculino y femenino y tienen cada uno a un niño de la mano y un perro con una correa. Un poco mas adelante dos leones solitarios muestran el antiguo emplazamiento del templo Harishankhana, destruido en el terremoto de 1934 y justo delante el templo el Fasi Dega, dedicado a Shiva, una escalera protegida por tres parejas de animales alcanza la base de la estructura sobre la que se levanta el templo en estilo shikhara.

Ahora dirigimos nuestros pasos hasta la cercana plaza Taumadhi. Nada más llegar te impacta la altura del templo Nyatapola, con sus casi 30 m de altura y cinco niveles que simbolizan los cinco elementos básicos, el agua, la madera, el fuego, la tierra y el metal. Está dedicado a la diosa Lakshmi. Construido por el rey Bhupatindra Malla entre 1701 y 1702 es el más alto de Nepal. Una escalera con parejas de feroces luchadores, Rajput Jaimal y Phattu; pares de elefantes, leones, grifos y diosas tántricas conocidas como Singhini y Toyahagrini protejen el acceso al primer piso, al que solo está permitido la entrada a los sacerdotes.

Al lado derecho de la plaza encontramos el templo de Bhairavnath, dedicado a una encarnación de Shiva, el terrorífico Bhairav, famoso por su carácter rebelde y obstinado. El templo se dispone en base cuadrada con tres techos y siete pináculos dorados.

A continuación nos dirigimos a la plaza Tachapal tol o Dattatreya, la más antigua de las que hemos visto. Aquí se encuentra el templo Dattatreya,  dedicado a esa deidad, una encarnación (avatara) mezcla entre Brahma, Vishnu y Shiva. Se dice que fue construido con la madera de un solo árbol en 1427 por el rey Yaksha Malla. Es un templo de tres pisos sobre una amplia base de ladrillos, decorados con escenas eróticas, que también se encuentran en los dinteles. La entrada está protegida por los guerreros legendarios que ya vimos en el templo Nyatapola, Rajput Jaimal y Phattu y delante de ellos se erige un pilar con la figura de un Garuda alado en la parte superior.

Alrededor de la plaza se levantan casas bellamente talladas en madera con laboriosas ventanas de intrincados dibujos, que antiguamente se usaban, en sus inicios, como albergues para devotos y peregrinos y posteriormente como hogares de sacerdotes o matemáticas (en el contexto de Nepal significa el hogar del sacerdote) y que hoy en día albergan el museo de la talla, Pujari Math o el museo del latón y cobre, Chikanpha Math. El paseo también nos llevó por otras Math como la Pulanchotha, Godawari o Bardali. El sol caía con rapidez y no tuvimos tiempo de acercarnos a la plaza de la Cerámica, donde los alfareros exponen y secan sus productos al sol. Continuaremos nuestra visita por Nepal en la ciudad Pashupatinah, veremos la estupa de Boudhanath y volaremos cerca del Himalaya.